El restablecimiento de la
libertad
Hoy pondremos fin al avance de William Walker y su
tropa de filibusteros, estamos dispuestos a darlo todo por nuestra patria,
alzaremos nuestros rifles y haremos que Nicaragua recupere la libertad que
nuestros antepasados obtuvieron hace 35 años.
Sé que no será un encargo fácil y sé que muchos perecerán en el intento, pero estoy seguro que luego de este día el futuro de Nicaragua cambiará.
La batalla está a punto de iniciar, hay más
filibusteros de los que esperaba, no puedo ocultar que tengo miedo, pero no
puedo rendirme; Regino y Javiera me esperan en nuestro hogar. Me pregunto si
ellos han tenido este curioso sentimiento, la incertidumbre de saber si todo
saldrá bien, pero bueno, no debería preocuparme por eso en este instante,
pronto el coronel nos dará la instrucción de agruparnos para iniciar el fuego.
Prepararé mi
arma para poder dispararle al primer enemigo que vea. Agradezco que nadie esté
cerca, el armar este instrumento me está significando un completo reto a pesar
de que se cómo hacerlo, ruego por que nadie venga en estos instantes, ya que de
lo contrario terminaré muriendo sin por lo menos haber ayudado en algo.
Estoy listo, los filibusteros están en frente, debo
respirar y concentrarme en el objetivo, no quiero fallar ni una bala, todo
error podría significar mi muerte; me
siento nervioso, nunca había apuntado a una persona; lo haré en 3, 2,1 ¡Le he
dado! ¡Gracias a Dios le he dado! Ha caído el primer soldado, pero al parecer
vienen más y más.
La venida de soldados no para y las balas se nos están
agotando, ¿a este paso lograremos ganar la batalla? ¿Qué hago? ¿Qué hago? Dios
por favor ilumíname ¿Debería rendirme? No, rendirme no es una opción; no dejaré
que este grupo de estadounidenses se adueñen de mi país, prefiero morir antes
que ceder mis derechos ante este tipo de personas. Sé que no tengo balas, pero
debe haber una forma, ¡Una forma para poder acabar con estos seres! Lo tengo,
aunque ponga mi vida en juego, no importa, ¡Si no lo hago yo, nadie lo hará! ¡la libertad de mis padres, amigos,
compañeros y de toda Nicaragua dependerá de este tiro! ¡Lo haré! ¡Lo haré!,
¡Acabaré con esta pelea!
¡He podido! ¡He
podido darle! Él también me ha dado, pero no importa, con mi acto he hecho que
el resto de soldados recobren sus fuerzas para seguir, ha sido una batalla
difícil, pero finalmente puedo ver una luz de esperanza, una luz de la futura
Nicaragua.
Este es uno de los monólogos que se ha seccionado (de 4) para ser el ganador.
ResponderEliminarMe gustaron mucho las técnicas narrativas utilizadas.
Muy buen monólogo, felicidades!
ResponderEliminarExcelente trabajo
Me ha parecido fascinante e interesante esta monográfica en particular
ResponderEliminarexcelente trabajo, muy interesante
ResponderEliminarMe encantó, excelente monólogo, me lo voy a tatuar.
ResponderEliminarMuy buen trabajo, me fascinó.
ResponderEliminarMuy bien.
ResponderEliminarEsto es muy importante.
ResponderEliminarMuy bien.
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